Después de pasar un buen rato preparando un plato especial para toda tu familia o a veces simplemente tras hacer un menú sencillo, la cocina suele quedar sucia de ingredientes, salpicada de aceite y demás.
Y si no limpias ese pequeño desastre a tiempo, seguramente se convertirá en un gran dolor de cabeza más tarde. Las manchas en la cocina son realmente desagradables a la vista. Aquí te vamos a dar a conocer algunas técnicas para eliminarlas.
Los mejores aliados para eliminar la grasa de la cocina
Ya sea una cocina de acero inoxidable o de vitrocerámica, la grasa acumulada en su superficie puede ser un verdadero desafío para aquellas personas a las que les gusta verlas brillar. Por eso, a continuación verás algunos de los trucos sencillos para poder eliminar rastros de suciedad incrustada con ingredientes que cualquiera tiene en casa.
Bicarbonato de sodio
El aliado perfecto de cualquier ama de casa. Es un blanqueador natural que sirve para eliminar desde las manchas amarillentas en las bañeras hasta la grasa acumulada en las superficies de la cocina.
En un bol se mezcla el bicarbonato de sodio con un poco de agua hasta formar una pasta, luego se aplica sobre la superficie. Se deja actuar durante al menos 30 minutos –sin restregar para evitar rayones- y luego se retira con una toalla suave y húmeda. Para potenciar el efecto, a la mezcla se le puede agregar unas gotas de vinagre.
Zumo del limón
Otra manera efectiva para quitar la grasa incrustada de la cocina es usar zumo de limón. Gracias a su acidez natural, es uno de los desengrasantes más destacados en el hogar.
Basta con poner unas gotas sobre la mancha y dejar actuar entre 5 y 10 minutos. Con la misma cáscara del limón, restregar un poco y retirar el exceso con una toalla húmeda. No solo eliminará la mancha, sino que el brillo volverá a la cocina.Para un mejor resultado, repite el procedimiento por toda la superficie.
Vinagre
La efectividad desengrasante del vinagre es incluso mucho mayor que la del limón. Así que, si la grasa incrustada se rehúsa a salir, se puede hacer uso de este producto que, aunque no es tan natural, es menos abrasivo que los químicos comerciales. Y seguramente es uno de los infaltables en cualquier despensa.
Un poco de vinagre y un paño de microfibra será lo único necesario para eliminar esa mancha desagradable. Ya sea blanco o de manzana, con cualquiera es posible realizar esta tarea. Si es muy fuerte la mancha, una esponja algo más abrasiva podría ser de gran ayuda.
